Detrás de la primera impresión...

         A simple vista: una masa azul homogénea, pero conforme nos adentramos en ella, esto queda como mera apariencia. En su interior se hallan peces de todo tipo, simpáticos, introvertidos, curiosos a la vez que “pasotas”, aventureros incluso asustadizos. Todos ellos habitan en un lugar tan  salado como frío. La imprevisibilidad está a la orden del día, porque nunca sabemos cómo reaccionará, dependiendo de muchos factores, puede llegar a provocar un increíble oleaje y al día siguiente transmitir paz y tranquilidad como la mar en calma.

          

                                      

    El mar, por estas razones me identifico con él. En un comienzo puedo aparentar ser algo que, cuando se me va conociendo te hace cambiar tu percepción hacia mi persona. Mis reacciones al igual que las del mar son fortuitas y mis sentimientos, algunos están a flor de piel y otros son difíciles de revelar.